Durante 40 minutos imparte las estrategias para guiar a un grupo de 12 jugadores (5 en tabloncillo y 7 como suplentes) al fin supremo: ganar. Sus tácticas, plasmadas en la tabla, se tienen que ejecutar en la cancha. Cuando se pierde, él es el encargado de revisar en qué se falló para realizar los ajustes respectivos, porque el baloncesto siempre te brinda la oportunidad de mejorar.
Néstor Salazar, entrenador de Cocodrilos de Caracas, ofreció su análisis con respecto al partido número 3 de la Gran Final de la Liga Profesional de Baloncesto, en la que perdió el conjunto de la Cota 905 86-78 ante Marinos de Anzoátegui, el pasado jueves 7 de julio en el primer juego en Puerto La Cruz.
Tajantemente sentenció: “entramos desenfocados en el partido, tuvimos de 5-0 en ataque en el inicio y aunque el otro equipo estaba apresurado, nosotros no aprovechamos esa ventaja. La clave estuvo en el primer tiempo”. Cocodrilos sucumbió los dos primeros cuartos del compromiso por 20-11 y 39-34.
Salazar acotó que “buscamos el juego en todos los aspectos, haciendo rotación, haciendo cambios. Conseguimos en buen momento a Windi Graterol, Jesús Centeno y Néstor Colmenares. Acercamos el juego por uno, pero vino el desespero de nuestra parte. Jugando de visitante hay que mantener la calma”.
El estratega oriundo de Yoco, estado Sucre, expresó que “necesitamos la producción ofensiva de Leandro GarciaMorales. Necesitamos que produzca en el ataque. Él sabe que puede hacerlo”.
La final está a favor de Marinos 2-1. Los avileños tienen la misión el próximo sábado 9 de julio, a partir de las 8:00 pm, de igualar la etapa decisiva por 2-2.
Vía Prensa Cocodrilos
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